La enfermedad del hígado grasom no alcohólico (HGNA) se refiere a un espectro de alteraciones hepáticas que se asemejan a la enfermedad hepática alcohólica, pero sin el consumo excesivo de alcohol, estas anomalías van desde la esteatosis simple a la inflamación del hígado (esteatohepatitis) y la cirrosis.

La importancia de la NAFLD como factor de riesgo cardiovascular es cada vez más reconocida, la enfermedad también está estrechamente relacionada con la obesidad, la diabetes, dislipidemia y resistencia a la insulina. Aunque el higado graso no alcohólico es más común en pacientes obesos, se produce en los individuos no obesos. Además, el hígado graso no alcohólico está estrechamente relacionada con varias características de resistencia a la insulina, incluso en la población con peso normal.

Chang y sus colegas (2009) han descrito una gran cohorte de trabajadores de la industria en Corea, que estaban obligados a someterse a exámenes periódicos de salud. Más de 15.000 trabajadores en edad de 30-59 años fueron pesados y se analizaron si tenían lípidos en suero elevados, la alanina aminotransferasa (ALT) junto con la ecografía abdominal. El hígado graso fue diagnosticado por ecografía .Después de excluir enfermedad hepática pre-existente en aquellos que toman medicamentos que podrían causar que HGNA, más de 5000 trabajadores estaban disponibles para el seguimiento de una media de aproximadamente 4 años.

Los investigadores observaron que un aumento de peso de más de 2,7 kg aumentó el riesgo de desarrollo de hígado graso por ecografía en casi un 50%. El efecto perjudicial del aumento de peso aun dentro del rango de peso normal indica la importancia de la resistencia a la insulina que conduce a la acumulación de grasa en el hígado. Incluso una pequeña reducción de peso reduce el riesgo de manera significativa en aquellos que también tenían niveles elevados de ALT.

Estas observaciones sugieren que el aumento de peso de por sí parece incrementar el riesgo de desarrollo de hígado graso. Por lo tanto, evitar el aumento de peso, incluso entre los individuos adultos sin sobrepeso puede ser útil en la prevención de esta enfermedad.

Soy el Dr. Gustavo Braslavsky

Soy medico especialista en hepatología, jefe del área clínica de trasplante hepático del Hospital Cosme Argerich y Diplomado en obesidad